domingo, 19 de mayo de 2013

Pequeño placer musical.

Cuando se propuso hacer esta entrada, sinceramente, no quería hacerla ya que no se me ocurría ningún pequeño placer que describir y además estaba más agobiada con los exámenes y todo, hasta que el sábado me dije, "bueno relájate y ya verás como se te ocurre alguna cosa" porque en realidad me gusta esto de escribir de cosas determinadas y hacerlo bien. Y para relajarme yo siempre me pongo música, la mayoría de las veces me pongo Queen y dije: "no creo que haya mejor que escucharlos a ellos".

Es realmente un auténtico placer ponerme los auriculares y darle a play para comenzar a escuchar, una tras otra, canciones de este genial grupo cantadas por ese dios, que se hacía llamar Freddie Mercury.
No podría decir que tengo una canción favorita de Queen, porque adoro cada vez que esos cuatro se ponen a tocar unos acordes.


Os pongo de ejemplo una de tantas canciones que tienen, una que para mi es de las más personales de Freddie y más tristes, ya que fue la última que cantó y que ni siquiera llegó a terminar, Brian May es quien canta la última estrofa.
Mother love se llama esta canción y nada más empezar a escucharla percibimos la batería de Taylor y un poco después el bajo y la guitarra de Deacon y May, reespectivamente.

Comienza a cantar Freddie, una voz triste pero fuerte a la vez, no quiere irse pero ha perdido toda esperanza de quedarse ...
Voy entendiendo la letra, y me doy cuenta de que tiene miedo, tiene mucho miedo y es un canto desesperado...hora de la guitarra de May, Freddie ya no volverá a cantar...
Acordes desgarrados recordando a su cantante, y comienza a cantar un Brian May con una voz apenada y desoladora, un último vínculo de Freddie con su banda, la última vez que sonarían los cuatro juntos.

Y por último, una mezcla desconcertante de diversas canciones y la voz de Freddie con su "EEEEEEEEEEEEEEEEEEEERO"; trozo de "Goin' Back" y final de un recién nacido llorando, una vida nace y otra, ya se ha acabado.